La formación volcánica del archipiélago creó una cordillera bajo el mar que emerge en ocho puntos reconocibles. Los aborígenes canarios se adaptaron al relieve de cada isla y a la climatología y, como si de una película de Stanley Kubrick se tratase, la contemporaneidad nos sigue dando la oportunidad de desarrollar nuevas formas de resiliencia en el continuo cambio que experimentamos dentro del planeta, en vistas a un futuro más sostenible, más inteligente, más unido y, por tanto, más humano.
La sistematización del turismo a lo largo de los años de una forma única e intransigente determina poco permeabilidad hacia otros flujos de interacción. Con ello, la diversificación del turismo hacia nuevos focos de interés generará una disminución de la masificación y, por tanto, un flujo más repartido y equilibrado en las islas que supondrá una implementación de la sostenibilidad en todos los sectores. En definitiva, la transversalidad y las conexiones siguen un esquema flexible y adaptado bajo las recomendaciones de la Organización Mundial del Turismo y sus ODS.
La elección del destino turístico es el punto inicial de un turista. En ello, nos convertimos en un destino con posibilidades de atraer a un visitante y poder guiarle por nuestra tierra y mostrarle los valores esenciales de nuestras identidades, adaptados a su modo de hacer turismo. Con estas pautas, planteamos una ruta segura, sostenible y atractiva en la que tanto el turista como los residentes pueden interactuar bajo una seguridad mínima y con una ocupación moderada, pues el impacto que genera la masificación en nuestro entorno perjudica seriamente el bienestar ambiental.
La importancia de estas redes recae en la transversalidad de las mismas y no en la independencia de ellas. La relación y los puntos donde intersectan son los que realmente cobran importancia para ofrecer una perspectiva más amplia al turismo emisor.
Ampliar la mira hacia un futuro más accesible y sostenible para el sector turístico supondrá un gran cambio para los residentes, siendo ésta una gran oportunidad de dar a conocer otros lugares de la isla que ya cuenten con infraestructura suficiente reforzando la oferta alojativa repartida en varios puntos, abogando por la cultura del respeto hacia el medioambiente y facilitando medios sostenibles.
El recorrido comienza en un lugar y termina en un destino, pero ¿y si el recorrido vuelve a comenzar varias veces a lo largo del mismo? Las conexiones entre diferentes redes y la flexibilidad que ofrecen las islas dan la oportunidad de generar nuevos puntos de inicio y nuevos nodos en los que la experiencia puede ser aún más completa de lo que nos podíamos imaginar. Con esta reflexión, el lugar en el que se asienta esta nueva Sede ha de entenderse desde la reinterpretación del nuevo sistema turístico.
La ubicación del proyecto en la isla de Gran Canaria, resuena bajo el eco de todos los recorridos turísticos, con la mayor influencia contextual bajo la atenta mirada del monumento natural del Roque Nublo y del Roque Bentayga. Recorrer como verbo que invita a la acción, generando secuencias con miradores enmarcados, salas interactivas, espacios libres públicos, accesibilidad, integración, entornos naturales, servicios necesarios y, sobretodo, emoción de contemplar y admirar lo que nuestras islas ofrecen.
La Sede se ubica en una zona con infraestructura suficiente para plantear un anteproyecto adaptado al objetivo del presente concurso, con miras a un panorama cultural. El aprovechamiento de infraestructuras existentes para la implantación de la propuesta facilita la eliminación de barreras arquitectónicas y sociales. El edificio cumple con las exigencias mínimas de Eficiencia Energética en aras de apoyarse en las ODS. La propuesta arquitectónica valora las distintas opciones de viabilidad técnica y económica respetando la escala a la que se propone y sus diferentes factores a tener en cuenta.
El esquema proyectual propone una flexibilidad adaptativa a los lugares escogidos en el resto de islas, tras un exhaustivo análisis en cada una de ellas, suponiendo esto un trabajo de contextualización y de manejo de escala en una siguiente fase. Poner en valor la identidad de cada isla refuerza la diversidad y la fuerza que cobra la denominación de Islas Afortunadas. Es precisamente esto lo que le mostraremos al turista, le orientaremos por las rutas analizadas al detalle y ofreceremos la posibilidad de diseñar su propio itinerario interactuando con apoyo de nuevas tecnologías.
Bajo el lema ‘Canarias diversa’ hacemos un llamamiento a reflexión sobre el Turismo Sostenible y a la puesta en valor de todas nuestras identidades, de dar un paso adelante con las nuevas definiciones de Turismo y la reinterpretación de la sistematización rígida a la que ha desembocado. Esta es la oportunidad de redefinir un sistema sostenible, mejorado, experiencial, adaptativo, inclusivo y atractivo sobre el turismo.
Canarias diversa une, se extiende, difumina los límites, relaciona, diversifica, respeta el medioambiente y aporta.