Introducción
Tenerife tiene un gran potencial para el desarrollo del turismo gastronómico. Con este nuevo centro, se pretende poner en valor el patrimonio cultural y culinario de la isla y mostrar la variedad, calidad y prestigio internacional de sus productos.
Localización
El proyecto se sitúa en el municipio tinerfeño de El Sauzal, concretamente en una parcela próxima con acceso directo desde la TF-5, una de las principales vías de la isla, lo cual hace al centro fácilmente accesible tanto a turistas como a residentes. Dicha parcela se encuentra elevada con respecto a la vía, obteniendo vistas privilegiadas del valle de la Orotava con la figura del Teide como fondo. Además, esta ubicación permite al centro colocarse en una posición visible desde la TF-5, siendo fácilmente reconocible desde la misma.
El municipio del Sauzal destaca por su gran tradición gastronómica en la que son de reseñable interés sus vinos y los guachinches, donde se puede degustar platos típicos y vino del lugar.
Quizás por ello, encontramos en este municipio dos centros turísticos de referencia a nivel gastronómico: La Casa del vino y la miel.
Añadiendo con esta intervención un tercer centro de turismo gastronómico, se pretende generar una red de centros que actúen como foco de atracción turística con la gastronomía típica de la isla de Tenerife como hilo conductor.
Propuesta
El proyecto emerge de la idea de generar una gran plaza pública semicubierta, con una total accesibilidad y fluidez espacial que le permita adaptarse a las distintas necesidades y actividades del centro. Es por ello por lo que se diseña una gran cubierta, que como si de una hoja de papel se tratara, se posa sobre el terreno adoptando la forma sinuosa de este, generando en su parte inferior un vacío en el que se desarrolla toda la actividad del centro. Esta cubierta se perfora en dos de sus puntos, dando lugar a aberturas que actúan como patios, inundando de luz los espacios interiores y aportando ventilación natural al centro. En dichos patios se opta por plantar vegetación autóctona de porte medio alto, que hará de filtro.
La cubierta ha sido diseñada de modo que se optimicen los recursos del entorno, abriéndose a las vistas y protegiéndose de la luz solar directa.
Parte de su superficie, será revestida con un tapiz de vegetación autóctona, lo cual favorece su integración en el paisaje circundante y favorece el carácter sostenible del edificio.
Dado su ligero alabeo, es accesible peatonalmente, dándole además un carácter privilegiado de mirador desde el que contemplar una vista panorámica del paisaje norteño de la isla.
Esta cubierta de formas sinuosas y revestimiento de tipo vegetal, quiere rememorar aquellas desaparecidas viviendas pajizas que poblaban las áreas rurales del norte de la isla.
Para salvar el desnivel del terreno, se generan una serie de plataformas a distintas alturas, cuyas conexiones se resuelven por medio de suaves rampas que hacen al centro accesible en su totalidad. Estas plataformas permiten sectorizar de manera física el centro sin perder su continuidad visual.
En la parte superior, encontramos la plataforma-parking, que ha sido diseñado por medio de una operación de horadación del terreno, quedando las plazas de aparcamiento semiocultas bajo este.
En segundo lugar, una gran plataforma alberga los espacios de recepción, aseos, tienda y áreas expositivas y de esparcimiento.
Una última plataforma en la parte inferior alberga el restaurante y aula taller.
Se ha optado por concentrar parte del programa en 3 volúmenes prismáticos cerrados, permitiendo de este modo que todo el espacio restante se use de manera polivalente en función de las necesidades y la programación del centro.
Hacia una arquitectura sostenible
Se ha optado por utilizar materiales locales, duraderos y de calidad, como el hormigón, pavimentos pétreos y terrizos, permitiendo de este modo minimizar los costes de obra, mantenimiento y huella ecológica.
Además, la elección del tipo de cubierta (cubierta ecológica) permite una gran cantidad de ventajas con un mínimo mantenimiento, obteniendo un máximo aprovechamiento de las inercias térmicas y el agua de lluvia. La elección de sistemas naturales de ventilación e iluminación permite reducir el consumo energético de manera notable, recurriendo a renovables como la energía solar y fotovoltaica cuando no se cumpla la demanda
Un centro, 7 soluciones
Para el desarrollo del centro en las otras islas se tomarán como premisas de actuación las siguientes:
- Las formas sinuosas de la cubierta se adaptarán a la geomorfología específica de cada ubicación en su respectiva isla, consiguiendo una mimesis con su entorno adyacente.
- Se seleccionarán áridos locales para conformar los hormigones, que junto a pigmentaciones naturales dotarán al edificio de una tonalidad próxima a la del paisaje circundante.
- El tipo de vegetación empleado en la cubierta ecológica será flora autóctona de cada isla y de su correspondiente estratificación vegetal, minimizando las labores de mantenimiento y consumo.
Cuadro de superficies
Hall (100 m²)
Recepción (15 m²)
Administración (36 m²)
Aseos (40 m²)
Almacén (23 m²)
Espacio consulta (36 m²)
Área exposición (190 m²)
Restaurante (100 m²)
Cocina (32 m²)
Aula-taller (50 m²)
Zona degustación (72 m²)
Tienda (40 m²)
Mostrador información (17 m²)
TOTAL (1.225 m²)